sábado, 14 de diciembre de 2013

Entrevista a Imanol Ortega: Investigador formado en Andalucía estudia la política turca

En esta entrevista a Imanol Ortega, politólogo y profesor de español, tuvimos oportunidad de entender mejor el paradigma político turco, nos dió a conocer las becas de Formación de Personal Investigador/Universitario, además de aportarnos un ejemplo de cómo seguir investigando en tiempos adversos. 

¿Qué te ha llevado a interesarte por Turquía? 

Después de terminar la licenciatura en Ciencias Políticas, inicié el máster sobre Cultura árabe y hebrea de la Universidad de Granada. Con la intención de aunar estos conocimientos, empecé a interesarme por el Islam político en Turquía y conseguí una estancia de 6 meses para terminar mi trabajo fin de máster en la Universidad del Bósforo.  Al terminarlo, al mismo tiempo que varios profesores me animaban a hacer la tesis, en 2010 me concedieron una beca predoctoral FPU (Formación de Personal Universitario). Desafortunadamente, al año, a causa de los recortes, me suspendieron la financiación y para sobrevivir, busqué trabajo como profesor de español.  Ya han pasado un par de años y en los ratos libres que me deja la docencia, intento acabar la tesis.


Una vez instalado en Estambul y tras el varapalo de que te quitaran la beca,  ¿cómo consigues salir adelante?

Para reinventarme como profesor de español, me saqué un título y al principio, trabajé en academias piratas, dando clases particulares y haciendo otros trabajos que pagaban una miseria. Luego, poco a poco, fui cogiendo experiencia y con determinación, llegué a dar clases en la universidad, hasta hoy.

El reto fue empezar de cero. Ya podía haber vivido solo en Granada durante cuatro años y Turquía ser un país mediterráneo, que el choque cultural no me dejó indiferente. Como ocurre en España, más allá de las zonas turísticas, el uso del inglés era escaso y yo no tenía ni idea de turco. Recuerdo que los tres primeros meses fueron duros y lo que me hizo tirar hacia adelante fue el hacer algo que me gustaba. Y no solo eso, el carácter amable de la gente también ayudó puesto que aprecian el interés que pone uno por integrarse. Al final, no solo me motiva la investigación, sino la inmersión cultural en todo lo que es el mundo turco, su política, su literatura, su lengua, sus tradiciones.

Con tu tesis, nos acercas a la política turca y al paradigma del partido político AKP.  ¿Qué metas y métodos han guiado tu trabajo de investigación?

Congreso de Sakarya en Octubre de 2012

En mi tesis, pretendo llegar a definir qué tipo de modelo de partido político es el AKP. Ha sido con las revueltas/revoluciones de la Primavera árabe cuando se ha empezado a considerar al AKP como un modelo exportable (existe un acalorado debate académico en torno a ello). Después de examinar todo el movimiento islamista en la historia de Turquía, trato de ver si el AKP es algo novedoso (democracia conservadora), una reformulación de lo anterior o un proceso de aprendizaje de todos los partidos islamistas o de los partidos predominantes de centro-derecha anteriores.

El trabajo es principalmente documental pero también me he entrevistado con académicos, periodistas y políticos turcos, al igual que voy aprendiendo el idioma con la intención de leer fuentes turcas y facilitar el estudio. Con decirte que la primera universidad en la que estudié, no tenían ningún libro en inglés y que la secretaría de relaciones internacionales me rehuía.

 ¿Cómo se relaciona tu investigación con las teorías existentes en la política turca, por ejemplo, con el centro-periferia?

Sí, creo que la noción centro-periferia es muy importante para comprender la política contemporánea de Turquía. Dicha noción se refiere a un centro que aglutina todo el proyecto de reformas positivistas y la herencia kemalista de Ataturk, que de alguna forma "desislamizó" Turquía del régimen teocrático otomano para instalar régimen republicano, a pesar de haber mantenido en sus comienzos matices autoritarios, pasó a una democracia multipartidista en la década de los años 50. El éxito electoral y posterior consolidación política del AKP debe ser considerada como un punto de inflexión en la política turca, la cual puede ser comparada con el éxito electoral del partido islamista Refah Partisi en la década de los años 90, anteriormente a la consecución del golpe militar de 1980 y de cómo los militares, por medio de una ideología hegemónica considerada como Síntesis Turco-Islámica, supervisaron un “soft Islam”, entre otras cosas, para contrarrestar al comunismo y legitimar las políticas de índole autoritario posgolpista. 


  

 ¿Qué marca la diferencia en el islamismo turco y qué instituciones velan por él?
Al parecer, lo verdaderamente característico y enriquecedor del Islam turco es la pluralidad y variedad de formas en que éste se manifiesta: islam de los doctores de la ley, de las cofradías, islam popular, islam político e incluso el islam singular y doctrinalmente marginal de los alevíes. Lo curioso es que la distinta relación entre estos tipos de Islam en la época actual junto con el laicismo republicano, han llevado a síntesis originales, como el propio AKP y extraordinariamente sugerentes en un contexto intelectual generalmente marcado por el pluralismo y la tolerancia religiosa. De ahí, la complejidad para clasificar con qué tipo de modelo de partido político es clasificado el AK Parti.

El modelo de laicismo alla turka esta supervisado institucionalmente desde la instauración de la república por medio de la Dirección de Asuntos Religiosos (Diyanet İşleri Başkanlığı, DİB). La intención del progenitor de los turcos, Mustafa Kemal Ataturk, no puede considerarse como una desislamización plena del sistema político sino más bien el posicionamiento de la conflictividad entre modernización y religión en la ignorancia de lo que él consideraba el “verdadero Islam”, es decir, un Islam que debía adaptarse a las circunstancias y necesidades de la época, para entre otras cosas, ser compatible con la Ciencia y la Modernidad las “verdaderas guías para la vida”.      Si el laicismo requiere la neutralidad del Estado hacia todas las religiones, sectas y credos, el modelo turco seria deficiente, ya que, el servicio que provee el DİB está dirigido a los musulmanes, con lo que no representa a los ciudadanos turcos que no mantienen esa creencia. Desde su creación, estas instituciones oficiales han divulgado una cierta interpretación y prácticas del Islam sunní de interpretación hanefí, excluyendo así a otras minorías religiosas musulmanas como los alevíes. A ello se añade la enseñanza de la asignatura obligatoria de religión, basada en el Islam de interpretación hanefí, como se ha dicho, sería un principio constitucional en este “extraño” modelo de laicidad. Por lo que dichas instituciones son las mejores herramientas para la homogenización de los turcos en términos de prácticas y creencias religiosas. 


 ¿Que parecido destacarías entre los procesos democráticos de España y Turquía respectivamente? 

Mas allá de lo religioso, sin duda, hay semejanzas entre España y Turquía  en los pasos que siguieron en la transición a la democracia. De hecho, muchos miembros del AKP, que en 2002 arrasó en las urnas con un 30% o 40% de votos a los pocos meses de su formación, habían formado parte de los anteriores partidos islamistas. Esos mismos protagonistas fueron los que de un tiempo para otro, en lo que algún académico considera como modernización de los partidos políticos de carácter islamista a un modelo de partido de masas, pasaron de proclamar la instauración de un Estado islámico en Turquía a declararse como demócratas, abogar por los derechos humanos y la adhesión del país a la Unión Europea.

Entiendo que tu voluntad por integrarte en la sociedad turca ha contribuido positivamente en tu trabajo, empezando por la ventaja de investigar in situ. 

Sí, a pesar de mantener un contacto directo con el objeto de estudio, en referencia a lo personal, todo esto me parece un sueño porque nunca me había imaginado poder subsistir en un país  tan diferente al propio, empezar desde cero, salir adelante y vivir circunstancias que te hacen entender mejor temas a los que anteriormente no le dabas mucho valor, como la inmigración cuando tú te conviertes en uno de ellos. Te hace crecer como persona y como investigador. Hay gente que escribe sobre Turquía sin haber estado nunca aquí. En mi tesina, por ejemplo, se notaba esa distancia.


Aparte de defender la tesis en la Universidad de Granada,  ¿qué expectativas tienes de volver? 
La verdad es que no lo sé. En una de las universidades para las que trabajo, conocedoras de mi investigación, me han dejado caer algún proyecto para cuando acabe la tesis. Pero, por otro lado, a nivel personal, mi pareja tiene ganas de volver. Dicho eso, no creo que en España pueda hacer lo que estoy haciendo aquí. CReo que en algunos casos, la carencia espabila y todo ello puede compensarse con una mayor motivación. 
Si no fuera por el apoyo y ánimo que recibí de ciertos profesores para investigar y de todo mi círculo de amistades y familia, el apoyo institucional brilla por su ausencia y lo más preocupante es el poco incentivo que hay a que la gente que se fue por una temporada, regrese. Entre las amistades que tengo, algunos consideran la vuelta, otros marcharse a un país diferente, pero ninguno puede esquivar la incertidumbre de hacer planes sin un apoyo fuerte. Por ello, lo que iniciamos de manera temporal, puede alargarse para siempre, dejando que países que no invirtieron en nosotros, se queden con nuestro talento.



jueves, 21 de noviembre de 2013

Entrevista a Belén Martín-Barragán

Belen Martin-Barragán, matemática e investigadora, nos atendió desde su oficina de la Universidad de Edimburgo, donde imparte clases e investiga desde agosto de 2013.
Para trazar su trayectoria como investigadora, hemos de empezar en la Facultad de Matemáticas, en Sevilla, donde realizó sus estudios universitarios, además de su tesis bajo la dirección de Emilio Carrizosa en Sevilla y Dolores Romero Morales, en Oxford. Antes de llegar a Edimburgo, pasó 7 años a caballo entre la docencia y la investigación en el Departamento de Estadística de la Universidad Carlos III, en Madrid. 

¿Qué propició tu marcha a Edimburgo?
Por un lado, mi situación en Madrid no era mala, pero tampoco era fija. Por otro lado, hacía un año, mi pareja había perdido su trabajo sin posibilidad de renovar el contrato y tras buscar, encontró trabajo en el sur Inglaterra, en la Universidad de Kent. Con este panorama, la oportunidad de salir era buena y mi situación era similar a la de él, por lo que seguí sus pasos hacia el extranjero donde encontramos más oportunidades.

¿Dónde encontrasteis estas oportunidades?
Hasta el año pasado, fue más fácil encontrar trabajo en Inglaterra gracias a que su gobierno tiene en vigor el sistema REF (Marco para la Excelencia en la Investigación en sus siglas en inglés), con el que evalúa a las universidades. Por ello, todas las universidades se apremiaron en los años previos al REF a contratar a gente cualificada y con un buen nivel de investigación. Eso para mí supuso una ventaja, porque aunque viniera de fuera, supieron valorarme mi experiencia como investigadora. 


¿Cómo se relaciona tu investigación con la estadística?
Mi área de investigación en lineas generales se centra en la investigación operativa, en los sistemas de optimización aplicados, tradicionalmente, a empresas para que estas utilicen sus recursos de manera óptima, aunque sus aplicaciones son múltiples. En mi caso, lo aplico a trabajar con datos y de ahí, mi relación con la Estadística que también extrae información de los datos. Pero yo utilizo unas técnicas que hacen que la optimización juegue un papel más importante al extraer información de los datos.  
En mi tesis, me centré en el problema de la clasificación. Por ejemplo, si tienes un grupo de personas, los que compran tu producto y los que no lo compran, o si tienes un grupo de enfermos y de sanos. Básicamente, tienes dos grupos, ya sean de individuos, de empresas o de objetos. Entonces, tú quieres encontrar una regla que, dada cierta información de esos objetos pero sin saber de que grupo son, te prediga cual es el grupo.  Hay muchas técnicas con este fin en la estadística, pero yo trabajo en otras técnicas más nuevas que utilizan la optimización. Ya en mi tesis, quisimos encontrar un clasificador, pero además que fuera fácil de interpretar o que la información que usara no fuera muy cara de obtener con nuevos individuos. 

Entiendo que en el campo de la salud, las implicaciones del uso de estas técnicas de clasificación puede ser vitales. 
Efectivamente. Entre enfermos y sanos, si le dices a alguien que está sano, que está enfermo, aunque se lleve un sofocón, si le haces unos análisis o un seguimiento, luego averiguas que está sano/a y de nuevo, le haces feliz. Sin embargo, si mandas a un enfermo a casa y su caso entraña gravedad, el fallo puede no tener remedio. 

Actualmente y en base al artículo que nos mandas, ¿qué técnicas destacarías de tu investigación?
Belén nos explica el modelo estadístico de 'overfitting'.
La técnica que utilizo tiene un gran poder de clasificación, pero hay unos parámetros que tienes que elegir antes. Si los conoces, es fabulosa, pero en muchos casos, se desconocen y esta técnica te ayuda a elegir los parámetros, de qué manera elegirlos. Existe un fenómeno curioso llamado 'overfitting' o 'sobreajuste', que al tratar datos muy aleatorios, necesita hacer 'sobreajustes' para tratar todo ese ruido en la información, resultando en una función inestable con muchas subidas y bajadas. Para datos futuros, este sube y baja puede ser azar y no representar información relevante.

¿Como podrías evitar ese ruido, esa distracción o 'sobreajuste' en el análisis de datos?
En la clasificación, una medida para evitarlo es en lugar de trabajar con todos los datos que tienes, seleccionas muestras mas pequeñas, o submuestreos y aplicas tu método. Luego, haces lo mismo con otra parte de los datos hasta promediar todos tus resultados. Elegir los parámetros para optimizar este proceso es complicado y las técnicas clásicas son poco eficientes. Mi optimización es elegir estos parámetros que faciliten la interpretación de los datos. 

Ya que nos has desmenuzando el contenido de tu investigación, me pregunto si al comenzar en un sitio nuevo entre investigadores, has de hacer mucho esto. 
Desde luego, al encontrarte investigadores de otras áreas, necesitas explicar tu trabajo de forma más asequible. Gran parte de lo que hacemos como investigadores, se parece a la enseñanza cuando enseñas algo tus alumnos, solo que en nuestro caso, explicas y enseñas tus ideas, tu investigación. Por eso, considero que la docencia y la investigación están muy relacionadas y que un buen investigador, debe saber transmitir su investigación.

Es sabido que es difícil compaginar bien docencia e investigación y en muchos casos, los profesores han de pedir periodos de excedencia. ¿Qué opinas al respecto?
En España, la verdad, es que tenía menos tiempo para investigar porque la carga lectiva era mayor, aunque siempre se puede sacar tiempo de los meses más tranquilos como julio, agosto o septiembre. La evaluación continua que instauró el sistema de Bolonia añadió más trabajo a la docencia y por tanto, menos tiempo para la investigación. 

Por último, cómo incentivarías tú la investigación en los más jóvenes?
Bueno, yo creo que quizás habríamos de preguntarnos, cómo hacerla más atractiva. En España, ya existen muchos jóvenes interesados en la investigación, entre ellos, los mejores estudiantes de cada carrera, pero el problema radica en la financiación. Para que te hagas una idea, en la mayoría de los países, para los alumnos que al terminar la carrera, quieren hacer una tesis, existen unas convocatorias de becas. En España, tradicionalmente, estas becas se convocan a principio de curso y alrededor de Febrero salen las resoluciones. El año pasado, sin embargo, tardaron más de un año en convocarse y esto es algo muy grave que añade incertidumbre y desventaja a la vida de estudiantes sobresalientes que tienen sus miras puestas en la investigación. Si quieren atraer a buenos investigadores, tienen que mejorar las condiciones y si el dinero escasea, al menos, que cumplan en los plazos de tiempo establecidos. 

Por otro lado, a otros niveles como secundaria, con aulas de hasta 30 alumnos y un solo profesor, los alumnos no tienen muchas oportunidades de sacar provecho a los laboratorios, ya sea por el riesgo que implican y la dificultad de controlar un grupo numeroso o por el miedo a romper el material. Facilitar prácticas de laboratorios con grupos más reducidos sería muy beneficioso.

Despedimos a nuestra segunda investigadora entre agradecimientos, deseándole mucha suerte y que no se pierda el próximo Festival Internacional de Edimburgo de 2014. Gracias Belén. 

jueves, 7 de noviembre de 2013

Entrevista a Alberto del Valle Rodríguez

He amanecido temprano para conectar con mi primer investigador, Alberto del Valle Rodríguez. Salvando 9 horas de diferencia, nos conseguimos comunicar, él desde Abu Dhabi, en los Emiratos Árabes y yo desde Virginia, en los Estados Unidos. Allí, trabaja para una antena del laboratorio de Claude Desplan (NYU Abu Dhabi), basado en la Universidad de Nueva York. En las líneas que siguen, nos habla de sus estudios, de cómo despegó de Sevilla para perseguir sus ilusiones personales y profesionales, de sus trabajos más significativos, además de aportarnos su opinión para acercar la investigación a los más jóvenes.

Nos interesa mucho tu historia y conocer los pasos que te han llevado hoy hasta Abu Dhabi. En primer lugar, ¿dónde estudiaste?
ADV: En la Universidad de Sevilla, de la que tengo muy buenos recuerdos. En el BUP, no tuve profesores que me marcaran mucho, pero en la carrera  sí tuve esos profesores que luego consideras tus verdaderos maestros, hubo cuatro o cinco  que me dejaron huella. La verdad es que la Facultad de Biología de Sevilla es muy potente para preparar a gente que luego quiere hacer investigación.

En el 2006, terminas tu doctorado en la Universidad de Sevilla. ¿Qué haces luego?
ADV: Durante la tesis, ya tengo una ilusión muy grande por vivir fuera de Sevilla una temporada larga, a ser posible en Nueva York, que es una ciudad que siempre me ha atraído mucho. Entonces, cuando estoy terminando la tesis empiezo a hacer una base de datos personal de todos los institutos de investigación importantes que hay en Nueva York y dentro de estos institutos, quienes trabajan en los campos que a mí me atraen más. Es muy frecuente en ciencias, que el tema en el que uno trabaje durante la tesis lo continue en el 'postdoc', que es el siguiente paso a la tesis doctoral, aunque en mi caso, aún gustándome mucho lo que hacía, tenía ganas de cambiar. Siempre me había gustado mucho la neurociencia, el estudio del sistema nervioso y la biología del desarrollo. Quería intentar encontrar algún laboratorio que hiciera una de las dos cosas o las dos cosas combinadas. Empecé a escribirles a los responsables de esos laboratorios, proponiéndoles que quería trabajar para ellos. Y tras conseguir varias entrevistas, tuve la suerte de entrar en el sitio que más me gustó y a gusto me hizo sentir, que es donde estoy ahora con mi jefe Claude Desplan. 

Desde entonces trabajas para el mismo laboratorio que combina la neurociencia y la biología del desarrollo. Actualmente, ¿en qué trabajan en concreto?
Alberto nos muestra un ejemplar
de los contenedores donde conservan
las moscas con que investiga.
ADV: Sí, es lo que comentas. De esta combinación, la biología del desarrollo estudia básicamente como un organismo muy sencillo, al principio de su ontogenia, de su ciclo vital que es el embrión, cómo un organismo se va desarrollando, va diversificando sus tejidos y va apareciendo un sistema nervioso o un sistema cardíaco para la circulación, un sistema respiratorio, etc. A mí me gustaba el desarrollo de una de estas partes, la formación del sistema nervioso. Y en lo que hago, el organismo modelo que nosotros utilizamos es la mosca de la fruta, que es un organismo muy sencillo y pequeñito, del que te he traído una muestra. Las moscas se crían en estos viales. Abajo tienen su comida y a través de la tapa de algodón les entra aire para que puedan respirar. En este otro vial, puedes ver lo que se llaman pupas,
Fase de pupa, estadio en que las
moscas hacen su metamorfosis. 
Mosca de la fruta adulta




fase donde las moscas realizan la metamorfosis y tienes estos gusanitos por aquí, que son las larvas. Hay algunas que están en unos estadios más iniciales, en huevos o embrión. Entonces, nosotros trabajamos en estos organismos porque son muy básicos. Solo tienen 6 cromosomas con lo cual la genética mendeliana es muy sencilla de hacer. Puedes hacer cruces de moscas con las líneas genéticas que tú quieras manipular, con los constructos genéticos que inyectas en el embrión y luego permanecen en el adulto. Es un organismo muy cómodo de utilizar en el laboratorio y sobre él se investiga desde hace un siglo.

Cabeza ampliada de la mosca de la
fruta, con el característico ojo rojo.
Mientras me contagias tu entusiasmo, me pregunto si es este el trabajo que te ha reportado más satisfacción.
ADV: Paradójicamente, a pesar de lo entretenido que es y el reto intelectual que supone el proyecto actual, es de mi trabajo de tesis de lo que me siento más orgulloso. Es un trabajo donde se mezcló un poco de suerte, de buena dirección, de mucho trabajo, de mucho esfuerzo del grupo de personas implicadas para empujar en la dirección adecuada. Cuando culminó esa historia, nos sentimos orgullosos de lo que habíamos conseguido allí.

¿Nos puedes contar en líneas generales de qué trato tu trabajo de tesis?
ADV: En mi tesis trabajé en cómo se produce la contracción de los vasos arteriales en el cerebro de las ratas. Para que los vasos sanguíneos se contraigan o se dilaten, hay muchos mecanismos que influyen, muchos factores. Generalmente, para que se contraigan los músculos es necesario calcio que está circulando en la sangre. Hay unos canales de calcio en los vasos sanguíneos que se abren para que entre el calcio y active los mecanismos para que se contraigan las arterias. Lo que descubrimos con este trabajo es que sin necesidad de que entre calcio de fuera, hay unas proteinas en la membrana de la célula que, simplemente, con un estímulo eléctrico, se activa una maquinaria relacionada con segundos mensajeros presentes en la membrana y estimulan el retículo sarcoplásmico, un saquito dentro de la célula que tiene calcio entre otras cosas. Liberándose el calcio de esos saquitos, se produce la contracción. Básicamente, concluimos que no es imprescindible el calcio de fuera para que se produzca la contracción.

¿Contemplabais este resultado en vuestra hipótesis inicial?
ADV: Sí, se sospechaba en trabajos anteriores. En estos gajes, normalmente tienes una hipótesis de lo que puede pasar, pensando en que lo más seguro es que no pase y luego, pues empiezas a ver otros caminos. Pero en este caso, sí formaba parte de lo que postulamos al principio, relativizar la participación del calcio externo en el fenómeno de la contracción arterial.

Alberto, gracias por acercarnos a tu investigación en un lenguaje muy accesible. Por último, ¿cómo promoverías tú la investigación en los jóvenes? y, ¿qué consejo le darías a muchos/as profesores/as que tienen una llave?
ADV: A ver, creo que para los niños o para la gente joven es importante atraer la atención. Entonces, la atención es muy difícil de atraer con una pizarra llena de fórmulas o dibujos que son difíciles de entender. Lo más fácil, sobre todo con los niños, es traer experimentos a clase muy sencillos de hacer, ponerlos sobre la mesa y que ellos vean cómo funciona. Por ejemplo, uno muy sencillo es el de usar patatas que funcionan como una batería para poner en marcha un reloj.

Y tan cierto es lo que dices. Hace poco, mis estudiantes quedaron pasmados cuando llevé ese reloj a 'pilas frutícolas y verduleras'  a clase. Más tarde, medimos la energía de diversos alimentos en milivoltios y les fascinó.
ADV: Claro, pues es muy interesante ver que esas cosas funcionan y sorprenden mucho. Luego, estudiar los fundamentos después de un experimento es mucho más interesante. Recuerdo que en la carrera tuve uno de esos profesores que te marcan. Fue en física, probablemente, la asignatura que menos me gustaba. Y me encantó este primer año de física con el profesor Manuel Jimenez Merendo. Él nos hacía demostraciones muy sencillas, por ejemplo, del momento angular, de la ultracongelación con nitrógeno líquido. De hecho, llevaba siempre un bolso, que le llamábamos el bolso de Mary Poppins del que sacaba cualquier cosa para sorprendernos. Por eso, si los niños lo ven, pueden sacar mucho más interés por saber lo que está pasando que de una explicación.


Ha sido estupendo este rato que nos has brindado, todo un lujo. Nos dejas con muy buen gusto para desayunar en Virginia.
ADV: Que aproveches. Aquí son las 4 de la tarde del jueves y en los Emiratos, en poco empezamos el fin de semana, se descansa y retomamos el trabajo el domingo.

Así, nos deseó buena suerte para esta iniciativa y despedimos a Alberto del Valle, nuestro primer investigador de origen andaluz, hecho un camaleón cultural. Gracias.  

miércoles, 23 de octubre de 2013

Así me inicié en la investigación

Durante los años más tiernos de mi educación obligatoria, desarrollé un cliché del investigador que consistía en un cruce entre Sherlock Holmes y un científico afanado en sus experimentos. En el colegio, no cuestioné este idea porque, si bien nos ensenñaron a buscar información y a hacer encuestas, apenas recuerdo oportunidades en las que ganaran protagonismo nuestras propias ideas y desarrolláramos experiencias para probarlas y contrastarlas con las que estudiábamos. Más tarde, en un bachillerato de letras y una carrera de traducción no encontré muchas oportunidades para discernir mejor la investigación.

Quizá sus experiencias fueron distintas y de manera temprana agarraron una idea del investigador más precisa que la mía. En mi caso, permanecí a oscuras hasta que realizando una maestría sobre educación bilíngüe, me ayudaron a comprender que se podía investigar sin ser científico. Me dieron la oportunidad de hacer un proyecto de investigación sobre una cuestión que me concernía y estaba viviendo en mis carnes como docente andaluza en Nueva York: Si yo hablara la misma variedad del español que mis alumnos mejicanos, dominicanos y puertorriqueños, ?como afectaría a su aprendizaje?

De ahí y con el consejo de mis compañeros y profesoras, me sumergí en lecturas relacionadas, a veces, cogiendo ideas nuevas o dándome a conocer trabajos previos que apuntaban en mi misma dirección. Mi cometido iba ganando relevancia conforme descubría que otras personas habían ahondado en fenómenos parecidos. Había pasado medio año y aún después de mucho leer, resumir y hablar de la problemática, no conseguía esgrimir exactamente a qué le quería dar respuesta y cómo lo iba a hacer. Era un quebradero de cabeza que me tenía enganchada. 

Y es que todavía no había presentado mi investigación a sus protagonistas: los estudiantes. Compuse un video con maestros representando diferentes variedades del español mientras interpretaban una misma historia gráfica en voz alta. Preparé encuestas y preguntas abiertas. Seleccioné a un grupo diverso en su variedad y dominio del español y, finalmente, nos reunimos en tres sesiones para elucidar sus respuestas al material con y sin mi presencia. Sorprendente fue concluir que las diferencias dialectales no parecen afectar a los alumnos tanto como, por ejemplo, los estilos de enseñar o las cualidades expresivas de la voz del maestro.  

Al final, lo más gratificante no fue corroborar o no mis ideas, sino haber hecho el viaje, experimentar el cambio de perspectiva en una misma. Superé algunas preguntas y aún me quedan muchas por responder. 

miércoles, 16 de octubre de 2013

Dejate querer y entrevistar

Construir un espacio para difundir la investigación significa colaborar entre nosotros. Por ello, pretendemos que cada entrada semanal consista en una entrevista que amablemente nos concedáis para acercarnos a vuestra trayectoria, los proyectos en los que trabajáis o habéis trabajado, alguna anécdota y vuestra visión para investigar y cambiar.
  
Para completar cada entrada con éxito, sugerimos que nos facilitéis: 
- 15-20 minutos de tu tiempo.
- Una cuenta a Skype, Gmail o Facebook. 
- Un ejemplar de trabajos realizados.
- Una imagen.
- Un enlace a tu LinkedIn.

Si te animas, ponte en contacto.